viernes, 5 de octubre de 2007

Las nuevas aventuras de Ursula Schumacher

¿Se acuerdan de mi alter-ego, Ursula Schumacher?, ¿aquel personaje intrépido y osado, que sentada al volante de su automóvil, recorría velozmente las calles de Santiago? ¿No se acuerdan? Entonces podrían refrescarse la memoria leyendo este post, o este también….

Bueno pues, les cuento cómo he ido poco a poco superándome a mí misma en el difícil acto de conducir un automóvil (no se rían, para mí ha sido súper difícil).

Cuando en aquel lejano mes de junio de 2006 obtuve por fin la licencia de conducir, mi esposo y yo teníamos un VW Gol, mecánico, este de aquí:

Con este carro tuve mis primeras aventuras y vencí mis primeros miedos, pero a pesar de todo me seguía costando sacar el auto y solamente lo hacía en casos de extrema necesidad. Manejar realmente me estresaba así que si había posibilidad de caminar prefería hacerlo o si tenía que ir a un sitio donde no conociera el estacionamiento optaba por irme en micro. Realmente creo que sólo utilizaba el auto para ir a mis clases y para visitar a mis amigas. Yo pensaba que de a poquitos iba a ir superando mis miedos hasta que a mi esposo se le ocurrió vender el VW y comprar esta camioneta:


Una Suzuki Grand Nomade 2007, mecánica. Linda la camioneta, pero yo la veía inmensa. Imagínense, si con el VW nomás sufría por sacarlo del estacionamiento del edificio, esta camioneta mucho más grande y ancha no había forma de que me atreva siquiera a manejarla por la rampita por donde se salía del estacionamiento. De hecho siendo mecánica es mucho más pesada y encima estaba nuevecita, brillante y lustrosa, y si por ahí le hacía un rayón era posible que mi esposo me solicite el divorcio en el acto. Y el otro tema era la estacionada, admito públicamente ser una bestia estacionándome y necesitar harrrssshto espacio para maniobrar y con un auto de esas dimensiones era imposible que lo logre.

Así que con el fin de salvaguardar el bienestar e integridad de mi persona, del auto y de mi matrimonio decidí interiormente jamás manejar la camioneta, o al menos esperar que mi esposo le haga un par de rayones para atreverme a manejarla. Todos los fines de semana quedábamos con mi esposo en que íbamos a salir con la camioneta para que practique y todos los fines de semana también ambos buscábamos algún pretexto para no hacerlo. En el fondo creo que él se moría de miedo de enseñarme a manejarla y yo me moría de miedo de rayarla.

Así que por un par de meses fui peatona nuevamente. La verdad es que no sentí mucho el cambio ya que el VW tampoco lo usaba mucho, pero a veces sí extrañaba tener auto cuando tenía que ir a mis clases por ejemplo, que eran lejos y tenía que regresarme de noche. Y la camioneta bien guardada en el garaje, ya que mi esposo se iba caminando a su oficina.

Pero eso sólo fue un par de meses. Cuando compramos la casa, ya era una necesidad tener dos autos. Ahí mi esposo tenía que llevarse la camioneta para ir a la oficina, y yo necesitaba algo para movilizarme porque salir de acá en micro es medio complicadillo. Quedamos en comprar un auto de segunda, yo feliz, ya que al ser un auto usado no iba a tener el enfermizo terror que tengo de rayarlo, es más si comprábamos un auto rayadito mejor para mí, me iba a dar más confianza.

Así que buscamos y encontramos este autito:

La foto la saqué de internet pero es el mismo modelo y casi el mismo color, todavía no le he tomado la foto respectiva a mi súper auto. Un Opel Corsa usadito, viejito y automático! Lo máximo!!! Cuando lo probé antes de comprarlo fue amor a primera vista, un auto de las dimensiones exactas, ni tan pequeño cual Tico ni tan grandote que me cueste estacionarlo y automático para no estresarme con los cambios ni el embrague. Realmente podría decirse que es el primer auto en el que me he sentido cómoda (si contamos todos los autos que he intentado manejar desde que tenía 18 años).

Le perdí el miedo a las calles, me metí por fin a la autopista (no hay forma de salir de mi casa si no pasas por una autopista) y ponía por fin música en el auto cuando antes no prendía la radio porque alucinaba que todo el mundo me tocaba el claxon.

Pero como todo tiene su final y nada dura para siempre la felicidad me duró mes y medio. La semana pasada tenía que ir a la clínica y no encontraba sitio en el estacionamiento subterráneo. Después de dar mil vueltas encontré un lugar al lado de una columna. Me metí mal, pegándome mucho a la columna. Cuando traté de enderezarme no se qué hice que me pegué más, traté de retroceder para salir del estacionamiento y volver a entrar cuando en eso escucho “Crrrrrrrrrrrrrrrrjjjjjjjjjjjjjjggggggggghhhh”. “Pucha!”, pensé, “Ahora sí ya le hice un súper rayón al auto”. Logré salir, volví a estacionarme derecha y cuando quise salir del auto para evaluar la magnitud del daño la puerta abrió sólo hasta la mitad y el espejo se cayó. Salí por la otra puerta y sintiéndome el ser más estúpido del Planeta Tierra vi lo que le había hecho a mi amado autito. Un rayón amarillo, color columna de la clínica, en todo el lado izquierdo, con la pintura descascarada, la puerta y el tapabarros descuadrados, y el espejo caído. Horrible oye. Desconsolada estuve a punto de echarme a llorar cuando en eso escucho que una señora me dice: “Uy, bienvenida al club”. Volteo y veo la parte derecha de su auto toda abollada, parece que también le pasó lo mismo en algún momento pero eso no fue ningún consuelo para mí.

Rompí mi autito y ahora está en el taller recuperándose de los daños. Y yo soy peatona desde el martes y lo seré por lo menos hasta el viernes de la próxima semana fecha en la que me han prometido que el auto estará listo, ojalá pues. Y salir de mi casa en micro es realmente una tragedia, si tengo que ir al doctor por ejemplo, al cual estoy yendo todas las semanas, tengo que tomar tres micros y hay uno de estos que pasa cada media hora. Ya les había contado lo lindo que funciona el Transantiago no??? Y tomar un taxi desde acá sería endeudarme de por vida, me saldría carísimo. Pero bueno, es mi culpa, por burra, por no saber estacionarme. Nota mental: Practicar estacionamiento, practicar estacionamiento, practicar, practicar, practicar.

37 comentarios:

Ana dijo...

:o(( te debes sentir mal por tu lindo autito,, pero animo, creo a todas y todos (que no se hagan) les pasa, veras que cúando menos te des cuenta, estarás manejando la camioneta :o)

saludos Ursula Schumacher!

Anónimo dijo...

Tranqui Ursula!! Es tu amado autito, pero ya lo están arreglando. Y felizmente que no fue un accidente con otro auto, porque eso sí que habría sido recontra complicado!!!

Mi Angel de la guarda dijo...

ursula tranqui vas a ver que con el tiempo y mucha practica vas hacer una super conductora, toda es la practica, da miedo al principio pero de alli, tomas confianza, grax a Dios no te paso nada ya tu lindo autito ya esta reparandose, y eso que no manejas aquie en lima que es realmente desesperante.....
un gran saludo, abrazos
besitos
alas,...

Patricia dijo...

A todos nos pasa,de ahora en adelante fíjate bien el entorno del sitio donde te vas a estacionar y elige el que no tenga ni siquiera una plantita cerca para evitar futuros rayones.
A mí no me importa estacionarme lejos con tal de no poner en evidencia mis malas maniobras en el proceso, hasta ahora me ha ido bien . Las rayas de mi carro las han hecho tus hermanitos.
Besitos.

RAHM dijo...

tu esposo todavía no te pide el divorcio? o está esperando la cuenta del taller? ja.ja.ja..

calma, a todos nos ha pasado, en mi caso, los 3 pequeños choques que tuve con mi auto fueron en los estacionamientos, tranquila, yo creo que con tu nota mental vas a ir bien...
ánimo.!

Anónimo dijo...

bueno Gucci, como dice el dicho... a cocachos aprendí... lo bueno es que ha sido algo material y se puede arreglar... aunque no kisiera ver esa facturita por la reparada... no creo que con ese antecedente Gus te kiera dejar su camionetita... ni para que lo cuides...
Un beso y saludos
LuChopp

Anónimo dijo...

¡Qué bueno leerte nuevamente! ¡Y ánimo! Tu love story con tu auto recién empieza!!!

Dragón del 96 dijo...

Lo bueno es que le estas perdiendo el miedo a manejar... pero miralo de esta manera, en poco tiempo te vas a volver mas experta que tu esposo, pues un maestro no se hace sino con muchos errores.

Escuché que lso autos eligen a sus dueños y no alreves... en Transformers, de Michael Bay.

Ahora se ha puesto de moda eso de los Transformers que la vez pasada me subi a un combi Autobot... MOSTRO!!! Aunque creo que era Decepticon por que casi nos mata a todos los pasajeros.

Slaudos

Unknown dijo...

Ohhhhhhhh Ursuliiiiiiiiita!! tu cochesiiito!!! bueno! hay q mirar el lado bueno del asunto, no se dice que destrozando se aprende? jejeje :P

Yo aún ni me atrevo a seguir las clases de mi chico, bueno a decir verdad él ya no me ha vuelto a enseñar, será un mensaje entre lineas? :P

Un bsito

La Gata de sus tejados dijo...

Oh chispas!! Bueno, malogrando se aprende no dicen? :s jeje ni modo por lo menos tiene arreglo... yo sigo siendo una cobarde para manejar... sé lo básico, muy básico(no he sacado licencia) y tampoco tengo quien me enseñe o con quien practicar. Se supone que con mi mejor amiga nos íbamos a meter a clases prácticas en el touring pero no tiene tiempo ni vida e irme sola no me cuadra tanto... :s lo sé pues soy cobarde para manejar así q no te sientas mal q tú te estás aventurando jejeje yo estoy!! pero q ni salgo! ;)
saludos!!

Juancho dijo...

No te preocupes, un rayón lo tiene cualquiera y felismente fue solo tu carro, una vez dejé el mio estacionado y al regresar estaba rayado y el guachi no sabia nada!

Nunca he manejado fuera del Peru y no estoy seguro si podré hacerlo bien: estoy tan mal acostumbrado al manejo ofesivo que se practica aqui q facil pueden multarme en Santiago, he visto personalmente como se maneja en otros paises y es pa quitarse el sombrero.

Gerard Matallana dijo...

Pierda cuidado, a todos en algún momento nos ha sucedido que al estacionarse nos ocurra tales desmanes. Lo del miedo, tiene que vencerlo, para que no me la domine a la hora de coger el volante, y, como leí lineas arriba, tenie que dar gracias de que no tiene que manejar en Lima, Perú. Es la primera vez que la visito y me causo mucha gracia sus vivencias. Muchos saludos y suerte con el autito.

Jocho dijo...

el volocho ya sale de reparaciones... y es hora que Jocho tome las pistas arequipeñas!!!!

MWAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA!!!!

besos! y vaya a practicar! jajajaja

Imberbe_Muchacho dijo...

bueno, epro asi poco a poco le pierdes miedo a las pistas, bien dicen que para aprender a manejar se necesita solo dos cosas: recordar la confianza inicial que se tenia al manejar...y recordar el primer choque
abrazos!

Ceci dijo...

Ayudando mentalmente....

practicar estacionamiento...practicar estacionamiento...practicar estacionamiento...

Realmente la práctica hace al maestro...
Mucha suerte con tu nuevo autito!!

Unknown dijo...

A cualquiera le pasa ( si me ha pasado).

markín dijo...

Horror, que queda en esos casos, sonreir o llorar :( Al menos el matrimonio está a salvo. Que dijo el maridito?

x1 dijo...

Sigue sacando el auto, no hay otra manera de que aprendas.

Gabriel dijo...

me ha encantado tu post con efectos especiales (“Crrrrrrrrrrrrrrrrjjjjjjjjjjjjjjggggggggghhhh”) mas me ha encantado volver a leerte.. cuidese usted que el auto se puede reparar

El perro andaluz dijo...

Te aseguro que no te vuelve a pasar. Es cuestión de práctica y confianza. Este "pequeño" accidente fue tu prueba de fuego.
Felicidades igual por tu carrito y no le vuelvas a hacer daño:)
Un beso.

monich dijo...

Espero que cuando vaya por Santiago, no hayas chocado, sino no tendré donde movilizarme, jijiji..

Mentira amiga!!!!... Sigue dándole a la práctica, tu puedes, y no te achiques cuando alguien te diga que no eres una experta manejando sólo porque eres mujer!.. Me ha pasado,... Desde aquí porras para ti.

Ursula dijo...

Ana Lucía: Sí pues, pasa hasta en las mejores familias… Aunque dudo mucho que me atreva a manejar la camioneta algún día, o que mi esposo me la preste, ja ja!

Danza: Sí dentro de todo fue un accidente menor, espero nunca estar involucrada en un choque con otro auto o algo así.

Angel: Jamás manejé en Lima, realmente no podría, soy bastante cobarde y sí pues, todo es práctica.

Patricia: Tendré que poner más atención de ahora en adelante y nunca más volver a estacionarme al lado de una columna.

Rahm: Ja ja, el divorcio era si es que rayaba su camioneta. Mi autito está asegurado así que el gasto no es tanto. Y tendré que practicar más, no queda otra.

Luchopp: Ja ja, ya puedo ir olvidándome de manejar la camioneta de Augusto. Al cabo que ni quería (así como el Chavo). Y realmente el seguro cubre bastante la reparación, así que no hay mayor drama por ese lado.

Blue Girl: Gracias!!, sí pues, no tengo el auto ni dos meses y ya lo choco. Tomémoslo como un error de principiante.

Dragón: Pucha yo me quedé dormida viendo Transformers así que no tengo idea de lo que hablas. Pero sí es cierto que el auto elige a sus dueños, en mi caso fue amor a primera vista, mi autito me decía: llévame, cómprame!!

Fiore: Mi consejo querida amiga: Métete a clases o contrata un instructor. La mejor forma de pelearte a muerte con tu novio, esposo, amigo, etc es pidiéndole que te enseñe a manejar. Ya me ha pasado.

Gata: Yo tb soy súper cobarde y saqué licencia ya de tía a los 34 años. La cosa es decidirse de una vez a hacerlo, si tu amiga no tiene tiempo anda tú sola nomás.

Juanitho: De hecho si uno está acostumbrado a manejar en el Perú le puede costar un poco adaptarse acá en Chile, porque acá el peatón tiene la preferencia y sí se respetan los Pares y los Ceda el Paso. Pero para quien aprendió a manejar acá, es súper fácil.

Chapu: Así es, poco a poco iré tomando más confianza y tendré más cuidado al estacionarme también. Gracias por tu visita, eres bienvenido cuando gustes.

Jocho: Pero primero saca tu brevete Jochito, apenas cumplas 18.

Imberbe: Así es, tuve mi primer choque, ya me siento toda una conductora experimentada, ja, ja.

Ceci: Gracias!!, apenas salga el auto del taller, a practicar se ha dicho!

Margee: Así es, nadie está libre.

Markin: Al comienzo casi lloro, ahora me río nomás. Y el maridito por suerte lo tomó deportivamente.

Cloud: Sí claro, tengo que seguir sacándolo.

Gabriel: Ja, ja, ese fue el sonido que hizo al rayarse.

Perrito: Sí pues, ya que me pasó esto, de ahora en adelante tendré mucho más cuidado al estacionarme.

Monich: Ja, ja, no te preocupes, cuando vengas espero ya ser toda una experimentada conductora. Y acá por lo general la gente no te grita ese tipo de cosas, sólo te pone mala cara nomás, pero yo muy digna ni me doy por enterada.

Besos a todos.

ysraelg7 dijo...

Bueno, lo pasado y hecho está, así que esto te sirva de experiencia mas no de trauma, sigue intentando y verás que sin que te des cuenta, vas a pérder tus miedos.

Sabes, en serio están muy bonitos tus carros eehhh, me han gustado mucho.

UN BESO.

darling dijo...

Recién pude ver las fotos xq aparte de bloquearme todo en la chamba me han bloqueado las imágenes. Q tal lisura!

Tu nuevo bebé está lindo. Estoy segura q quedará tan guapo o mejor q antes.

Y nada, no te desmoralices, todo es cuestión de práctica.

RacuRock dijo...

Por lo que veo mas baratio te saldra el transporte publico jejeje

Mariella M dijo...

Que suerte que tienes un carrito al que puedes maltratar, jejejeje. Auqnue claro me imagino que tampoco la idea es esa, pero así aprenderás y tendrás más confianza.
saludos

César De María dijo...

Yo me compré un Golf cuando nació mi hija. Nunca había manejado. Tomé clases. Aprobé la licencia. Me dieron el carro. Me metí en un estacionamiento y rayé el carro con la columna, pues tratando de alejarme de ella me acercaba más y más. Hasta hoy odio parquearme junto a una. Te compadezco.

Ursula dijo...

Ysrael: Claro, la idea no es quedarme traumada sino que me sirva de experiencia para que no vuelva a pasar.

Darling: Sí de hecho va a quedar mejor que antes porque cuando lo compré la pintura estaba medio viejita y ahora lo van a pintar de nuevo je je… Al menos de algo sirvió el choquecito.

Racu: Ni creas, el transporte público tiene un costo psicológico muy alto.

Mariella: Por ahí decían que echando a perder se aprende, mi autito tendrá que aguantar mi inexperiencia nomás.

César: Oh a mí me pasó igual, tratando de alejarme de la columna me iba pegando más. No soy la única!

Saludos

Claudia dijo...

Uy Ursu ... me recuerdas a mis episodios con mi autito (usado Honda Accord del 96), es mi primer auto tambien con cero experiencia al volante ... he vivido como 3 episodios asi, de rayones, pelones y resbaladas en el hielo, pero tranqui que ya perdiste el miedo y ahora como bien dijiste tu solo debes practicar!

Suerte y espero alguna foto de la Casa nueva ... en que sector queda???

Besos!
Clau (going crazy)

Ms. M dijo...

Que pena lo de tu carro!
Es un stress manejar en Lima!!!!
Y bueno ahora estás sufriendo asl consecuencias y has regresado a ser peatona!

DEtodas manera spiensa que le auto te lo rgeresan en màs dìas porque los talleres son re incumplidos!!!!!

Beso,

Carlos Caillaux dijo...

Tienes la clave, practicar, practicar y practicar, el resto llega solo (la confianza)
Saludos.

schatz67 dijo...

Mi querida Schumi,

Hace un tiempo llegué al grifo que esta cerca de mi casa y mientras echaban la gasolina me llamó la atención un grupo de cuatro mujeres que estaban paradas al costado de un auto.Las 4, muy bien vestidas y simpáticas estaban agrupadas y miraban con atención una de las esquinas posteriores del auto.Intercambiaban miradas de sorpresa, se hacían preguntas entre ellas, señalaban con sus impecables uñas salidas del manicurista las maniobras que hacía un empleado del grifo que estaba agazapado a un costado del auto y soltaron un Oooooh!!!mayúsculo cuando el mismo muchacho terminó de aflojar los pernos del neumático posterior.Estaban asistiendo con una mezcla de asombro y admiración al primer cambio de llantas en su vida y se felicitaron y abrazaron alborozadas cuando el encargado terminó la faena en cuestión.

Ese día terminé de entender la extraña y distante relación que tienen las mujeres con los automóviles.Y aunque pocas cosas me son novedosas en ese sentido nunca dejarán de sorprenderme la versatilidad y variedad de abolladuras que sueles propinarle a los autos que manejas.Si como dice Drag-Aunt los vehículos pudiesen escoger a sus dueños el unico voluntario que se presentaría en tu caso sería un tanque T-55 ruso.A ese si es un poco difícil que le hagas siquiera una raspadita.

Aunque contigo nunca se sabe...

Un abrazote

Schatz

Ursula dijo...

Claudita: Ji, ji, creo que les pasa a todas las principiantes no???? A practicar nomás. La casa nueva queda en Huechuraba, apenas terminen de poner el barniz en la entrada reparto fotos!

Ms. M. : Y eso que yo no manejo en Lima, manejo en Santiago y para mí también es un stress. Y seguramente el auto no me lo van a entregar mañana, sospecho que recién me lo entregarán el martes porque el lunes es feriado.

Carlos: Exacto, practicar y seguir practicando.

Schatz: Ja ja, aunque tu comentario peque de algo machista, no puedo dejar de darte la razón. Yo perfectamente podría haber estado en ese grupo de mujeres observando cómo cambiaban la llanta. De hecho, ya me ha pasado, cuando reventé la llanta del auto, éramos tres mujeres en el carro perfectamente inútiles, tuvimos que esperar más de una hora que venga la grúa porque ninguna sabía cambiar una pinche llanta.

Saludos!

Marea dijo...

qué buena historia aunque que pena que tu carrito ya está en el hospital, al menos no es la camioneta de lujo, suerte y con práctica, serás una experta.

Ursula dijo...

Marea: Si pues, tengo que practicar... Mi carrito ya salió del hospital, yeeeeeee... esperemos que no lo vuelva a romper.

Besos

El Doc dijo...

Jajajajajajajajajaja!!!! ¡Qué buena! Y... ¿tu autito ya tiene nombre? Jejejeje... pobrecito... su primer raspón en tus manos... bueno, ahora que ya salió, me imagino que practicarás técnicas de estacionamiento, ¿verdad?

Y no te preocupes, todo el mundo ha hecho lo mismo. Una vez en el estacionamiento de la U. Pacífico (que tiene los sitios más chicos que he visto en mi vida) un vigilante me trató de ayudar a un espacio particularmente estrecho junto a una columna. Guiándome mientras yo entraba lentamente, me decía "dale... dale..." hasta que, de pronto, sentí un ¡crash! mientras escuchaba la voz del citado señor diciendo "¡le diste!". Casi lo mato por imbécil.

Ursula dijo...

Doc mi auto es conocido como el Momomóvil, (no preguntes por qué). Y qué vigilante más idioooooota!!!, yo lo hubiera matado!!!

Saludos!